miércoles, 9 de junio de 2010

Tandas en circuito: el ritual, diversión y trazado

El viaje hasta el circuito forma parte tambien de las tandas. La mayoría no tenemos la suerte de tener uno al lado de casa, aunque en mi caso, mejor así, porque seguro que me tendrían que tratar para curar la adicción que se me crearía. Según los kilómetros que tengamos que hacer hasta el trazado, habrá que sopesar si nos conviene más pasar la noche anterior cerca del circuito para estar más descansados o pegarnos un madrugón para llegar antes de que comiencen las tandas.

Yo prefiero viajar el día anterior y dormir no cerca, si no en el mismo circuito. Por suerte conozco al organizador de las tandas a las que suelo ir y no le importa compartir box y ronquidos conmigo. La noche la paso al estilo camping, colchoneta y saco de dormir al suelo, aunque me encantaría tener una autocaravana con garaje como la que os presenté hace un par de meses. Con ella arreglarías el tema del transporte y gozarías de todas las comodidades en tu estancia en el circuito. Habrá que seguir jugando a la lotería.

La verdad es que dormir en el box al lado de tu moto también tiene su encanto. Además, ella no ronca hasta que la despiertas. Y te duermes en el ambiente apropiado para lo que te espera al día siguiente. Eso sí, hay que madrugar para preparar el box antes de que llegue todo el mundo.

El día de la diversión

Por fin te levantas para disfrutar del día que llevas tanto tiempo esperando. Una vez desperezado y sin legañas toca desayunar. No es conveniente hacerlo de manera muy copiosa, porque una de las cosas más incómodas para montar en moto es sentirse pesado.

Al hilo de sentirse pesado, es muy importante que no hagáis como yo y cuidéis mínimamente la forma física. Llevo unos años bastante dejado físicamente y he cogido unos cuantos kilos de más, y no os quiero ni contar lo incómodo que se está. Primero porque estás embuchado en el mono, y segundo porque te vuelves más torpe a la hora de moverte encima de la moto. Lo dicho, muy importante mantenerse en forma para tener un buen rendimiento rodando rápido.


Normalmente las tandas se organizan en grupos según el nivel de pilotaje. En dos grupos, rápidos y lentos, o como en el caso del día que rodé, en tres, rápidos, intermedios y lentos. Esta vez y dado que hacía mucho que no rodaba me apunté a intermedios. Es importante que no nos creamos muy rápidos o pequemos de humildes y aún yendo rapidillo nos apuntemos al grupo más lento.

Si vamos fuerte en un grupo más bien lento no disfrutaremos igual porque nos cortará la vuelta hacer muchos adelantamientos, y al revés, si vamos lentos rodeados de pilotos rápidos estorbaremos y podremos crear situaciones de peligro a los más rápidos. Hay que ser consecuente y elegir bien el grupo para que este sea lo más homogéneo posible en nivel de pilotaje.

Antes de comenzar las tandas se suele hacer un briefing para dar a conocer las normas y las banderas con las que nos van a marcar lo que sucede en pista. Las más importantes son como las que vemos en las carreras, la de cuadros indica el fin de la tanda, la amarilla precaución porque hay alguna caída o salida de pista y la roja suspensión de la tanda.


Una de las cosas a las que hay que acostumbrarse al meterse en circuito es a estar pendiente solo de lo que tienes delante. Olvídate de lo que pasa a tu espalda y de los retrovisores (lo mejor es desmontarlos). Los que vienen más rápido que tú, descuida que sabrán por donde adelantarte. Hay que estar pendiente de pilotar fluido y no hacer movimientos y trayectorias extrañas, que eso si que puede ser peligroso. Por lo demás hay que centrarse en trazar lo mejor posible y en disfrutar a tope.

Para pasártelo bien en circuito no necesitas una deportiva de última generación, ni siquiera necesitas una deportiva. Lo suyo es rodar con una moto con la que te sientas cómodo y así podrás conocer sus límites y sus reacciones en un entorno seguro.

Algunos amiguetes míos no se atreven a entrar a circuito porque creen que se les va a ir la pinza y se van a caer… Nada de eso, si eres prudente en carretera también lo serás aquí, pero con la diferencia de que podrás tirar a tope sin mirar de reojo a ningún guardarraíl asesino, buscando tus límites y mejorando en cada vuelta sin preocuparte de agentes externos. Ya sabemos que nuestro deporte es peligroso, pero es raro ver accidentes graves en tandas libres. Rodar en circuito es bastante seguro.

Si no vas a correr ningún campeonato o como es mi caso, simplemente buscas disfrutar de tu moto con seguridad, te recomiendo que no te obsesiones con el tiempo que haces por vuelta. Si no tienes muy claras las cosas mejor no mirar el crono o preguntar a los demás que tiempo hacen, te puede llevar a forzar innecesariamente y a tener un susto por ello. Además hay que ser muy seguro en los adelantamientos y no hacerlos a la ligera, a mí me gusta tomarme mi tiempo si me encuentro a alguien más lento, me da igual que me fastidie mi vuelta rápida. Todo sea por la seguridad.

Yo por ejemplo, en el Circuito de Almería he estado rodando entre 2’08 y 2’11 casi todo el tiempo, excepto una vuelta buena que hice en 2’04 altos y alguna más en 2’06. Son tiempos lejanos de los que hacen los más quemados, pero seguro que disfrutamos igual. Miro el crono de la moto por curiosidad, aunque la mayoría de vueltas se me olvida darle al botón. Para la próxima que vaya espero ir menos lastrado y comprobar que en forma se va más rápido.

El día que fui rodamos seis tandas de treinta minutos cada grupo. Para una persona que no esté muy acostumbrada es suficiente. Pilotar en circuito es cansado. Según en qué trazado más o menos, pero a lo largo del día se hace mucho ejercicio. Por ello es fundamental hidratarse bien y comer para no tener una pájara. Como dijimos en la primera parte bebidas isotónicas, fruta (muy buenos los plátanos, como hace Nadal) y algo ligero es lo apropiado. Aunque al mediodía tengas hambre a raudales no te llenes mucho, que si no las últimas tandas querrás cambiarlas por una siesta.

Un detalle a tener en cuenta es no salir del box y empezar a rodar fuerte de primeras, hay que dejar que los neumáticos cojan temperatura, si son blandos les llevará un par de vueltas, aunque yo me quedo más tranquilo empezando a ir rápido pasadas tres. Para evitar esto y poder salir con más confianza existen los calentadores. Aparte de que suponen un plus en seguridad mantienen mejor la goma al no sufrir cambios bruscos de temperatura entre tanda y tanda.

Los demás pilotos te agradecerán que mientras estás con las gomas frías no vayas por la trazada buena. Poco a poco según vayas rodando más rápido la vas cogiendo. Así evitas que los pilotos que llegan a tu posición tengan que frenar bruscamente creando con ello situaciones de peligro.

Otro consejo que os doy es que cuando comencéis a rozar la rodilla os fijéis en el desgaste de la pastilla. Según tu forma de descolgarte y colocar la pierna la desgastarás de una forma u otra, y si no la tienes bien colocada te puedes llevar la sorpresa de gastarla mucho por una parte y empezar a pulir el cuero del mono.

La verdad es que uno se lo pasa de maravilla en un circuito. Os recomiendo que lo probéis. Incluso si eres novato vas a disfrutar, y no solo eso, vas a conocer tu moto y a mejorar tu conducción en un sitio seguro. A mí particularmente me sirve de anestesia para luego rodar más tranquilo en carretera. Una vez que has pilotado en circuito aún eres más consciente de lo peligrosa que está. Los que rodáis habitualmente sabréis a lo que me refiero.

Ver reportage 1ª parte en Moto22.com

-Tandas en circuito: el ritual, la diversión y el trazado. 1ª Parte.

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