Checa es la mejor baza para ver a un español subido al podio de Cheste: "Mi Honda es la más estándar de la parrilla, pero la haremos funcionar".
¿Cómo afronta Valencia?
Como cada carrera, pero con más ilusión por ser la de casa. Se genera más ilusión porque vienen familiares y amigos, lo que supone un estímulo.
¿Recuerda cómo calentó a la afición el año pasado?
Estuvo muy bien toda la carrera, menos la última curva... Neukirchner y yo no nos entendimos y nos fuimos al suelo. Habrá que poner intermitentes. Aparte de ganar, lo importante es poder animar la prueba y esa vez lo hice con la remontada. De haber sido una carrera entre amigos, hubiera sido la mejor del año, pero esto son las Superbikes y el resultado sí que importa.
¿Qué puede esperar la afición de Checa este domingo?
Quiero volver a las posiciones de podio, pero no será fácil. Yo pensaba que estaba en las Superbikes, pero parece que estoy de nuevo en MotoGP por las motos que tengo al lado. Las nuevas Aprilia y Yamaha están muy bien y, de la Ducati, mejor no hablar. La Honda es la más estándar de la parrilla, pero la vamos a hacer funcionar.
¿Cómo va el hombro lesionado en vísperas del inicio?
Físicamente ya estoy bien. En Qatar sí me molestó un pelín.
¿Hábleme de Ben Spies?
Está sorprendiendo un poco, pero ya el año pasado hizo una buena carrera con la Suzuki de MotoGP en Indianápolis. Está en un equipo muy bueno y su Yamaha parte de la M1 de Rossi. Aquí hay obsesión por sacar potencia y con los Pirelli no la puedes aprovechar del todo. Su motor estilo big bang le facilita un poco las cosas. Él ha llegado muy fino y forma un buen paquete moto-piloto. Tiene talento para estar en MotoGP y su estilo de conducción le hace ir rápido, que es la clave de todo esto.
¿Es feliz en las SBK?
Disfruté mucho el año pasado, con el cuarto en la general, las dos victorias en América y la posibilidad que Honda me dio de competir y ganar las 8 Horas de Suzuka. Este año el objetivo es luchar por el título, pero los rivales han mejorado mucho y nosotros, nada. Es más, hemos dado algún paso atrás con los problemas de chattering. Técnicamente estamos por detrás, pero en las Superbikes todo puede cambiar muy rápido y confío en solucionar los problemas para subir al podio en Cheste.
Como cada carrera, pero con más ilusión por ser la de casa. Se genera más ilusión porque vienen familiares y amigos, lo que supone un estímulo.
¿Recuerda cómo calentó a la afición el año pasado?
Estuvo muy bien toda la carrera, menos la última curva... Neukirchner y yo no nos entendimos y nos fuimos al suelo. Habrá que poner intermitentes. Aparte de ganar, lo importante es poder animar la prueba y esa vez lo hice con la remontada. De haber sido una carrera entre amigos, hubiera sido la mejor del año, pero esto son las Superbikes y el resultado sí que importa.
¿Qué puede esperar la afición de Checa este domingo?
Quiero volver a las posiciones de podio, pero no será fácil. Yo pensaba que estaba en las Superbikes, pero parece que estoy de nuevo en MotoGP por las motos que tengo al lado. Las nuevas Aprilia y Yamaha están muy bien y, de la Ducati, mejor no hablar. La Honda es la más estándar de la parrilla, pero la vamos a hacer funcionar.
¿Cómo va el hombro lesionado en vísperas del inicio?
Físicamente ya estoy bien. En Qatar sí me molestó un pelín.
¿Hábleme de Ben Spies?
Está sorprendiendo un poco, pero ya el año pasado hizo una buena carrera con la Suzuki de MotoGP en Indianápolis. Está en un equipo muy bueno y su Yamaha parte de la M1 de Rossi. Aquí hay obsesión por sacar potencia y con los Pirelli no la puedes aprovechar del todo. Su motor estilo big bang le facilita un poco las cosas. Él ha llegado muy fino y forma un buen paquete moto-piloto. Tiene talento para estar en MotoGP y su estilo de conducción le hace ir rápido, que es la clave de todo esto.
¿Es feliz en las SBK?
Disfruté mucho el año pasado, con el cuarto en la general, las dos victorias en América y la posibilidad que Honda me dio de competir y ganar las 8 Horas de Suzuka. Este año el objetivo es luchar por el título, pero los rivales han mejorado mucho y nosotros, nada. Es más, hemos dado algún paso atrás con los problemas de chattering. Técnicamente estamos por detrás, pero en las Superbikes todo puede cambiar muy rápido y confío en solucionar los problemas para subir al podio en Cheste.
as.com
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